domingo, 14 de junio de 2009

La política: Un asunto familiar en Japón

La política: Un asunto familiar en Japón

La renuncia del Ministro de Asuntos Internos, Kunio Hatoyama, del gabinete del Primer Ministro Taro Aso, y su posible pase al partido de la oposición, el Partido Democrático de Japón, donde su hermano Yukio Hatoyama es el líder, vuelve a poner sobre el tapete el asunto de la prevalencía de lazos familiares entre los políticos en Japón.

De acuerdo a algunas fuentes* se dice que en Japón, por ejemplo, más de un tercio de miembros de la Cámara Baja de la Dieta (el Congreso japonés) son familiares o descendientes de políticos. Casi todos los Primeros Ministros han sido descendientes de políticos, uno de ellos de un Primer Ministro. Así, el actual, Taro Aso, es nieto del que fue Primer Ministro, Shigeru Yoshida, y tataranieto de Toshimichi Okubo, uno de los fundadores del Japón moderno en la Restauración de Meiji (de 1868 en adelante). La esposa actual de Aso, Chikako, es hija del que fue Primer Ministro, Zenko Suzuki.

El anterior Primer Ministro a Aso, Yasuo Fukuda, fue hijo de otro Primer Ministro, Takeo Fukuda. El anterior a Yasuo Fukuda, Shinzo Abe, fue hijo de Shintaro Abe, que fue Ministro de Relaciones Exteriores, y nieto de otro Primer Ministro, Nobusuke Kishi.

El anterior a Shinzo Abe, Junichiro Koizumi, es un político de tercera generación. Su padre Yunja Koizumi fue miembro de la Dieta, su abuelo Matajiro Koizumi fue Ministro de Correos y Telecomunicaciones. Cuando se retire de la política Junichiro, este fin de año, la posta se la pasara a su hijo, Shinjiro Koizumi (ver la misma nota anterior). Como se ve, se perpetua, por ejemplo, la dinastía política Koizumi.

Lo interesante es que pronto habrá elecciones en Japón, probablemente en agosto o setiembre, y se enfrentaran Taro Aso, del partido gobernante, el Partido Democrático Liberal, con Yukio Hatoyama, del Partido Democrático. Los dos son nietos de anteriores Primeros Ministros, Shigeru Yoshida y de Ichiro Hatoyama respectivamente. Y estos dos últimos también fueron rivales en su época.

Yoshida era del Partido Liberal, y Hatoyama era del Partido Democrático (de esa época, diferente del actual). Yoshida fue 5 veces Primer Ministro. Después le sucede Hatoyama. Justamente después de terminar Ichiro Hatoyama como Primer Ministro por segunda vez, el 22 de noviembre de 1955, los dos partidos se unieron, el Partido Liberal y el Partido Democrático, para constituirse en el Partido Democrático Liberal, Jiminto en idioma japonés, Después de eso Ichiro Hatoyama se convierte en Primer Ministro por tercera vez, esta vez del Jiminto, y desde esa época este partido ha estado en el poder en Japón.

Lo que nos trae a otro tema. Japón ha sido gobernado en los últimos 50 años prácticamente por un solo partido, el Partido Democrático Liberal. Desde 1955 hasta la actualidad, salvo un pequeño lapso en 1994, ese partido se mantiene en el poder. En la próxima elección hay una pequeña posibilidad de que gane el partido de la oposición. Pero aunque este último gane, en realidad varios de este han venido del partido gobernante, el Jiminto. Así, el mismo Yukio Hatoyama, junto con su hermano Kunio, eran los dos miembros del Jiminto y lo dejaron en 1993 para formar el Partido Democrático. Kunio regreso al Jiminto en el año 2000.

Muchos del partido opositor vienen del Jiminto. El anterior líder del Partido Democrático, que fue remplazado por Yukio Hatoyama, Ichiro Ozawa, también vino del Jiminto. Ozawa mismo es otro político descendiente de familiares políticos pues su padre fue congresista también.

Dos de los políticos más populares en Japón, el actual gobernador de Tokio, Shintaro Ishihara, y el Ministro en dos ocasiones, Nobuteru Ishihara, son familiares. Ambos son del Partido gobernante, aunque Shintaro se retiro oficialmente de la política y del partido Jiminto en 1995. Shintaro es padre de Nobuteru. Shintaro tiene otro hijo también congresista, Hirotaka Ishihara.









* El 37.8% de miembros de la Cámara Baja de la Dieta después de la elección del 2005, y 11 en el gabinete de Aso de 17 Ministros, eran descendientes de políticos. Ver “Hereditary Politicians a fact of life” http://search.japantimes.co.jp/cgi-bin/nn20090427a2.html

martes, 2 de junio de 2009

Perú y Japón frente a un futuro TLC

Perú y Japón frente a un futuro TLC
Carlos Aquino Rodriguez*

Se inicio en mayo las negociaciones para un futuro Tratado de Libre Comercio del Perú con Japón. Esto sigue a las buenas relaciones que hay entre los dos países, manifestada con la visita la última semana de febrero de este año 2009 del Ministro de Relaciones Exteriores del Perú a Japón, en reemplazo del Presidente Alan García, en una estadía que sirvio para inaugurar una feria sobre el Perú. También en noviembre del año pasado con ocasión de la cumbre de líderes del foro de Cooperación Económica Asia Pacifico, APEC, en Lima, el Primer Ministro japonés Taro Aso visito el Perú.

Este año 2009 se conmemora el 110 aniversario del comienzo de la inmigración japonesa al Perú. Fuimos el primer país en Latinoamérica en tener relaciones diplomáticas con Japón, desde 1873, y el primero en recibir una migración masiva de japoneses, desde abril de 1899. Como resultado de esto actualmente el Perú tiene la segunda mayor comunidad de descendientes de japoneses en Latinoamérica (después de Brasil).

Las relaciones económicas también son tan antiguas. En la década de 1920 Japón ya era uno de los principales socios comerciales del Perú y la inversión japonesa en nuestro país es continua desde la década de 1960, con empresas como Ajinomoto con ya 40 años de presencia en el Perú (se estableció en 1968 en Lima).

La inversión nipona acumulada a fines del 2008 en el país fue de 168.39 millones de dólares según datos de Proinversión, ubicándolo en el 16avo lugar en orden de importancia como fuente de inversión extranjera directa con el 0.94% del total. El 64% de la inversión japonesa esta en la minería.

Por otro lado, Japón fue por muchos años el segundo socio comercial del Perú, algo que decayó desde la década de 1990, pero que esta mostrando signos de recuperación en los últimos años (decayó tanto por el lado de las exportaciones e importaciones. En el lado de las compras desde Japón estas decayeron pues los productos japoneses fueron desplazados por productos baratos coreanos y chinos, autos y electrodomésticos sobre todo). En todo caso el 2007 las exportaciones peruanas a Japón aumentaron 78% respecto al año anterior, alcanzando los 2,184 millones de dólares, aunque decayeron el año 2008 a un total de 1,853 millones de dólares, ubicando al país oriental como quinto destino de nuestras ventas al exterior. Por el lado de las importaciones de nuestro país, en el 2008 se le compro al país nipón un total de 1,141 millones de dólares, siendo el 7mo lugar de origen de nuestras compras.

Japón además contribuye con ayuda económica al desarrollo del país. Por muchos años nuestro país ha sido (y sigue siendo) el que ha recibido más ayuda (en la forma de donaciones, capacitación técnica, o préstamos a bajo costo) del gobierno japonés en Latinoamérica. Según datos de la Embajada de Japón en el Perú, hasta el año fiscal japonés 2006 el Perú ha recibido 4,649 millones de dólares de ayuda oficial de ese país.

Para fortalecer y estrechar las relaciones entre ambos países, especialmente para que el Perú pueda aprovechar el enorme mercado japonés (este país es la segunda mayor economía del mundo, y sus 128 millones de habitantes tienen un ingreso de más de 40,000 dólares per cápita anual), se necesita:

1. El mejor conocimiento del mercado japonés a través de por ejemplo el intercambio de información entre empresas peruanas y japonesas que se puede llevar a cabo desde instituciones como el Consejo Empresarial Perú Japón, CEPEJA, que agrupa a importantes empresas de ambos países. Los empresarios de ambas naciones deben conocerse más, especialmente a nosotros nos toca conocer mejor como negocian los japoneses, el detalle que ponen en establecer una confianza mutua, en el conocimiento de la contraparte, el respeto a la palabra empeñada, a los contratos, a la seguridad para su personal y sus operaciones, etc.

2. La existencia de una comunidad de aproximadamente 65,000 peruanos en Japón debe ser plenamente aprovechada. Los peruanos empezaron a llegar a ese país masivamente desde fines de la segunda mitad de la década de 1980. En 1988 habían solo 864 peruanos en Japón, pero esta aumento rápidamente a 10,279 en 1990, ante la escasez de mano de obra en ese país. Con la promulgación de una ley en 1990 que permitía la entrada de descendientes de japoneses (nikkei) el número de peruanos en ese país aumentó cada año.

La comunidad peruana en Japón no solo contribuye enviando remesas a sus familiares en el Perú, sino que a través de su presencia en Japón ayuda a presentarnos como país y asimismo a nuestros productos. Pero se necesita por ejemplo que los mas de 70 restaurantes de comida peruana que existen en el archipiélago japonés mejoren para atender mas a clientes japoneses y eso requiere una política para que esos locales (que mayormente sirven a la comunidad peruana) puedan adecuarse a los gustos de los japoneses en aspectos como la presentación (tamaño de los platos, demasiados grande para el gusto japonés), sabor de la comida, ambientación del local (se pone música muy ruidosa), publicidad del producto, etc. y de esta forma, exportar un servicio como la gastronomía y así también potenciar la venta de nuestros productos agrícolas y otros relacionados hacia ese gran mercado.

Por otro lado Japón esta atravesando una crisis económica que esta golpeando a la comunidad peruana. Esto durara todo probablemente hasta el año 2010. El Perú a través de su Consulado en Japón debería ver mecanismos para ayudarlos, a través de facilidades para los que quieran regresar al Perú, la simplificación y reducción de los costos de los diversos tramites que ante el Consulado realizan los peruanos allá, promover y apoyar una mas activa organización entre ellos y ayudarlos por ejemplo a desarrollar sus negocios, y también poder facilitar, informar, de los diversos mecanismos de ayuda que el gobierno japonés esta implementando para ayudar a sus ciudadanos en esta crisis, ayuda que se extenderá también a los extranjeros que viven allá.

3. Hay que prepararse institucionalmente para poder vender más productos al mercado nipón. Entre los bienes que tienen más posibilidades, dada la demanda existente allá, están los alimentos, como los vegetales, frutas, y aun de carne de algunos animales, como el de pollo por ejemplo. Pero el mercado japonés es muy exigente en el cumplimiento de las medidas fitosanitarias y nosotros tenemos que adecuarnos a eso, para lo que se necesita el fortalecimiento de instituciones como el Servicio Nacional de Sanidad Agraria, SENASA, encargado de esas tareas. Aquí se requiere que el personal peruano pueda seguir capacitándose en las técnicas necesarias para que nuestros productos pasen las pruebas que demanda el ingresar al exigente mercado nipón. Para eso, la colaboración que brindan entidades japonesas como JICA, la Agencia Japonesa para la Cooperación Internacional, y JETRO, la Organización Oficial del Japón para el Comercio Exterior, debe aprovecharse al máximo.

La apertura de negociaciones con Japón para establecer un Tratado de Libre Comercio (TLC) nos abrirá las puertas del mercado nipón. Ya se firmo un Tratado Bilateral de Inversiones entre ambos y esto aunado a un posible TLC podría atraer más inversiones del país nipón y así los negocios y el comercio entre ambos aumentarían.

En un posible TLC del Perú con Japón debería contemplarse el tema del movimiento de personas. En los acuerdos que Japón ha firmado con algunos países asiáticos como con Indonesia y Filipinas, en los llamados Acuerdos de Asociación Económica, se contempla esto. De hecho esos acuerdos ya entraron en vigencia y así Japón esta permitiendo que un número limitado de enfermeras y los que cuidan a personas mayores de esos países estén yendo a trabajar a Japón (bajo ciertas condiciones). Esto dado el hecho de que hay una escasez de enfermeras en el país nipón y que un porcentaje cada vez mayor de su población este envejeciendo rápidamente. De hecho ya más de un 20% de los japoneses son mayores de 65 años.

El Perú ya envía enfermeras a varios países, como a Italia, y entonces ese tema debería ser incluido en una negociación con Japón.



* Especialista en Economía Asiática. Profesor de Economía de la UNMSM. Traductor Publico Juramentado del idioma japonés
carloskobe2005@yahoo.com
http://www.geocities.com/Eureka/Plaza/1406/index.html