Japón subirá los impuestos
Japón va a tener que incrementar los impuestos para hacer frente a los gastos de reconstrucción y otros. El impacto del desastre de marzo se dice costara entre 200 a 300 mil millones de dólares en infraestructura y capital perdido, esto es como el 3% a 5% del tamaño de su economía.
El gobierno japonés ya ha pasado este año dos presupuestos suplementarios para financiar los gastos de reconstrucción, el primero en mayo y el segundo ahora mismo en julio. Estos mayores gastos deben ser financiados con mayores ingresos, por impuestos. El gobierno no tiene casi margen para reducir gastos así que tiene que aumentar sus ingresos.
El gobierno japonés ya ha pasado este año dos presupuestos suplementarios para financiar los gastos de reconstrucción, el primero en mayo y el segundo ahora mismo en julio. Estos mayores gastos deben ser financiados con mayores ingresos, por impuestos. El gobierno no tiene casi margen para reducir gastos así que tiene que aumentar sus ingresos.
Esos gastos son una carga para el gobierno que ya tiene una enorme deuda. Actualmente la deuda pública es de casi 220% del tamaño de su economía, el más alto en el mundo industrializado, y uno de los más altos en el mundo. Por eso para remediar este problema, el gobierno debe incrementar sus ingresos con impuestos.
El país tiene una de las tasas más bajas en el mundo de ingresos por impuestos relativo al tamaño de economía, pues estos representan solo el 17% de su economía. Para esto debe elevar su impuesto al consumo, que actualmente está en un 5%. Debe elevarlo a un 7% u 8% en el 2012 y después llegar a un 15% e incluso un 20% según algunos. En todo caso hay una meta de duplicar la actual tasa de 5% para mediados de esta década.
Los mayores ingresos por impuestos también son necesarios para hacer frente a pagos en la seguridad social y en las pensiones de una sociedad con cada vez más adultos mayores. Como se sabe en Japón casi un cuarto de la población ya es mayor de 65 años, y se calcula que para el año 2050 esta tasa será de 40%.
En lo que queda de este año se debe pasar un tercer presupuesto suplementario y se dice que ese sería el momento donde se anunciara el incremento de los impuestos.
El riesgo que ven algunos es que esa alza podría frenar la recuperación de la economía japonesa. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), que publico el 19 de Julio un reporte donde analiza la situación de la economía japonesa, los años 2008 y 2009 Japón tuvo un crecimiento negativo de -1,2% y -6.3% respectivamente y el 2010 se recupero a un 4.0%, pero el terremoto mas tsunami y el desastre nuclear de marzo de este año puso un frenazo a esa recuperación. Como resultado el 2011 su crecimiento será otra vez negativo en -0.7% pero se recuperaría a 2.9% el 2012.
Pero se dice que por ejemplo el alza del impuesto al consumo del 3% al 5% en 1997 freno la recuperación de la economía japonesa, que venía de una recesión producto del rompimiento de su burbuja económica de 1989-1990.
Otro problema que se plantea es que el alza en el impuesto, al deprimir la demanda, podría prolongar la deflación, que los precios sigan cayendo, que el país ha experimentado. Japón atravesó durante la década de 1990 y la década pasada periodos de bajo crecimiento y periodos de deflación. El Índice de Precios al Consumidor fue de 0.1% el 2007, un 1.4% el 2008 y cayó en franca deflación el 2009 con un -1.3% y también el 2010 con un -0.7% y se proyecta que este año 2011 prácticamente la inflación sea cero o un 0.1%. Ese mismo nivel se estima sea en el año 2012, pero el temor es que al alza de impuestos haga caer otra vez en deflación al país.
El Ministro de Finanzas Kaoru Yosano, un ferviente proponente del alza de impuestos, ha dicho que incluso una deflación pequeña no sería tan mala si eso sucede por elevar los impuestos. Algunos en el partido de gobierno están opuestos a que se discuta también ese tema pues el alza de impuestos es impopular y esto disminuirá sus posibilidades de ganar una próxima elección (aunque esa oposición ya es menor). El partido del Primer Ministro Naoto Kan tiene un índice de aceptación muy bajo.
Lo bueno en cierta forma es que hay un consenso, incluso en gran parte de la población, de que los impuestos deben elevarse para pagar por la reconstrucción, así que es muy probable se eleven los impuestos pronto en Japón.